La Inteligencia Artificial dejó de ser una promesa lejana para convertirse en una herramienta concreta, aplicable y con impacto directo en los resultados de negocio. En nuestras conversaciones con clientes y partners, vemos cada vez más claro que la adopción efectiva de IA se abre en dos caminos paralelos y complementarios:
- La eficiencia organizacional, y
- La productividad de los equipos.
Ambos caminos pueden iniciarse de forma independiente, pero lo ideal es abordarlos en simultáneo o de forma escalonada, porque se potencian entre sí.
Camino 1: Productividad de equipos con Microsoft Copilot
Copilot para Microsoft 365 ya está disponible y es una de las formas más directas y visibles de aplicar IA generativa en el trabajo diario. Los usuarios lo integran naturalmente en Word, Outlook, Teams, Excel y PowerPoint, generando documentos, resúmenes, ideas, fórmulas o mails en segundos.
Pero la clave para obtener resultados reales no está solo en comprar las licencias, sino en acompañar el despliegue con un plan de adopción bien diseñado.
Acciones concretas para este camino:
- Charla introductoria: para generar interés, entender el potencial y resolver dudas frecuentes.
- Compra de licencias: basada en perfiles y casos de uso reales.
- Plan de adopción: con entrenamiento, casos de uso sugeridos, seguimiento y embajadores internos. Esto es lo que marca la diferencia entre “tener Copilot” y sacarle verdadero valor.
Camino 2: Eficiencia organizacional con Copilot Studio + Power Platform
El segundo camino se enfoca en los procesos de negocio: reducir la carga operativa, acelerar tiempos de respuesta y minimizar errores. Aquí, la IA se apoya en la automatización mediante Copilot Studio, Power Automate y Power Apps, muchas veces integradas con RPA (automatización robótica de procesos).
¿Un ejemplo concreto? Automatizar el ingreso de datos desde formularios escaneados (OCR) o interfaces legadas, para que luego una IA continúe el flujo con decisiones automatizadas o interacciones conversacionales.
Acciones concretas para este camino:
- Discovery de procesos: entender cómo funciona la operación actual, identificar cuellos de botella y tareas repetitivas.
- Implementación de automatizaciones: con foco en impacto rápido y escalabilidad.
- Incorporación progresiva de IA: en etapas, agregando capacidades como reconocimiento visual, decisiones basadas en datos o interfaces conversacionales.
Dos caminos que convergen
Aunque pueden abordarse por separado, ambos caminos convergen hacia una organización más inteligente, ágil y preparada para lo que viene. La clave está en accionar con foco claro, herramientas adecuadas y acompañamiento experto.
Desde nuestro equipo ya estamos ayudando a diversas organizaciones en estos procesos. Si querés conversar cómo empezar en alguno de estos caminos, escribime y lo vemos juntos.
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